Edicto 3. El Miedo.

Infundir miedo entre la población a través de  la amenaza. Es curioso ver que hasta el sol es nuestro enemigo, como lo muestran los distribuidores de bronceadores y bloqueadores. El miedo debe llegar a todos, especialmente a los gobernantes, esos títeres que pueden ser impulsados a cometer genocidios, masacres, aniquilaciones en nombre del "idolo" de turno (el gobernante deja de ser lider a ser el representante de "Dios" sobre la tierra). Noten en sus consignas de campaña como cambian de solucionar problemas y emprender proyectos a hablar de las deficiencias de sus competidores, de hablar de divinidad, de hablar de líderes muertos "santificados". Todo esto esperando la complacencia del pueblo, que entre más ignorante, menos oportuidad tendrá de debatir las promesas vacías de este prospecto de asesino. Y es que el miedo llega a el poderoso de la forma más sutil: El miedo a perder el poder y el prestigio. Ahí es cuando la ceguera comeinza: Herodes asesinando niños por miedo a que uno de ellos en un futuro le hagan perder el poder. Hitler asesinando todo pueblo que en algún momento amenace el poder del partido y su economía. Otro colombiano ordenando asesinar miembros de izquierda por el miedo a que ellos puedan en algún momento tomar el poder y por fín realizar obras que valgan la pena. Pinochet erradicando todo estudiante, al saber que la ciencia no la podia manejar y podía en algún momento perder el poder. En Corea del norte Amenazando, mientras un venezolano habla con los pajaritos. Así es como el miedo se propaga a todo el pueblo y no quedará más que seguir votando por el mismo, o desaparecerá.